Bienvenid@s a mi diario de recetas 🍴💛
Me encanta tener la oportunidad de compartir aquí una de mis grandes pasiones: la cocina.
En este rincón iré publicando recetas de platos que he preparado y que tienen éxito asegurado.
Si te animas a probar alguna, ¡cuéntame cómo te ha salido! Me hará muchísima ilusión saberlo.
La gastronomía, en su sentido más amplio, siempre ha sido parte de mi vida.
Disfruto de todo el proceso: desde pasear por el mercado eligiendo los mejores productos, hasta preparar una bonita mesa con el mantel, la vajilla y la cubertería que acompañan cada plato.
He leído infinidad de libros de técnicas y recetas, pero a estas alturas, cuando me pongo frente a los fogones, cocino por intuición.
Me dejo llevar por lo que ese momento me inspira, apuntando después el proceso para que no se me olvide... ¡porque no siempre sale igual! 😅
También he vivido mis pequeñas catástrofes culinarias, sobre todo en los comienzos.
Todavía me río recordándolo: recién casada, a los pocos días de mi boda, cociné carne en salsa para unos invitados... ¡y estaba tan dura que no había quien la comiera!
O aquella vez que preparé un arroz con verduras que terminó escondido antes de que llegaran los invitados porque parecía una poleá sin sabor.
Tuvimos que improvisar un plan B. ¡Historias que ahora me arrancan sonrisas!
Amo todo lo relacionado con la cocina, incluyendo las películas gastronómicas como Chef, Ratatouille, Sin reservas, Seducción a la carta, Julie & Julia...
Y aunque Tomates verdes fritos no es exactamente sobre cocina, después de verla no pude resistirme a preparar tomates verdes fritos en casa.
Como decía Julia Child:
"Una vez que hayas dominado la técnica, nunca más tendrás que mirar la receta. El único obstáculo real es el miedo al fracaso."
Aquí encontrarás eso: cocina intuitiva, recetas tradicionales, errores, aprendizajes y mucha pasión.
Cocinar es atreverse, corregir si algo sale mal, y sobre todo, divertirse en el proceso.
¿Sabías que el brownie nació porque alguien olvidó echar levadura al bizcocho? ¡Bendito olvido!
Y la tarta Tatin, otro error feliz que terminó conquistando al mundo.
Así que ya sabes: nadie nace siendo un gran cocinero. Se aprende intentándolo una y otra vez.
✨ Sigue leyendo, cocinando y disfrutando conmigo. ¡Bienvenid@ a mi cocina!